domingo, 15 de octubre de 2017

EL CONOCIMIENTO DE LAS ONDAS DE FORMA


Los Templarios tenían conocimiento sobre las influencias de las formas sobre las criaturas vivas. Esto es algo que no es extraordinario ya que algunas civilizaciones dominaban mucho antes que ellos estas energías poderosas e invisibles, que actualmente se denominan Ondas de Forma.
Antes de continuar voy a explicar que son las Ondas de forma:
Cualquier forma geométrica, plana o con volumen, produce y emite ondas, unas veces nocivas y otras favorables para el organismo. El suelo también las emite.
Los romanos eran conscientes de la presencia de estas fuerzas y, antes de fundar una población en un lugar, dejaban paciendo el ganado durante un año, tras ese periodo de tiempo, mataban algunos ejemplares y examinaban sus hígados, según su estado tomaban entonces la decisión de establecer allí o no su poblado.
También los chinos conocen desde la antigüedad estas emanaciones Telúricas a las que denominaban “ Fung Shui” –Puertas de salida de los Dragones-.
Los celtas hablaban de la Wuivre, los griegos de los ríos infernales.
Por supuesto en Occidente estos conocimientos fueron ocultados hasta caer en el olvido.
Los egipcios, por su parte, probablemente no construían las grandes pirámides, para que fueran tan solo tumbas.
La mejor prueba de ello la constituye el hecho de que la Pirámide de Keops, por ejemplo este compuesta por 26.000 bloques de 12.000 Kg
Imaginando que los obreros y esclavos colocaran como máximo 10 bloques por día, – lo cual en vista de los métodos de construcción que utilizaban según los investigadores modernos parece ya una cifra exagerada- se habrían necesitado 664 años para construirla, y eso sin tener en cuenta los cimientos que había que cavar ni los planos que había que proyectar!
Bien pues, la gran pirámide funcionaba como receptor, y emisor de ondas, conocidas con el nombre de rayos verdes. De hecho es la longitud de onda más corta del universo, que se produce en la cámara del rey, a un tercio de la altura de la pirámide, aproximadamente. Este rayo verde negativo posee la extraña propiedad de momificar la carne.
También los Templarios conocían estas propiedades, que no por sorprendentes dejan de ser reales. La forma Octogonal que se da con tanta frecuencia en la arquitectura Templaria facilita cierto estado de meditación casi visionario. Sumerge al individuo en una capacidad receptiva a la iniciación. Las catedrales también emiten ondas de forma y además captan las energías cosmotelúricas. Las numerosas representaciones de San Miguel o de San Jorge ( por las cuales se nombra Caballeros a los hombres) son indicios de la presencia de la Wuivre, el rayo mágico de la tierra.
Estos dos Santos vencen al Dragón entran en contacto con él mediante la lanza. El dragón simboliza a la vez las energías celestiales, por sus alas y las energías infernales por el fuego que escupe.
Tampoco es casual que las catedrales estén construidas sobre antiguos lugares megalíticos. Los druidas tenían profundos conocimientos de estas corrientes y sabían sacar provecho de ellas para regenerar al hombre.
La recién creada Geobiología vuelve a descubrir los signos de la naturaleza que pueden ayudar a una vida sana o por el contrario nefasta.
Creo que sería bueno reencontrar el conocimiento de los antiguos y en particular de los Templarios, que llevaron hasta el límite su habilidad en estos temas.
La Orden del Temple más que cualquier otra fue una Orden Constructora. Por su influencia de su Jefe espiritual, San Bernardo y por lo tanto de los Cistercienses, los Templarios se lanzaron a numerosas y amplias construcciones de edificios religiosos- Catedrales, Capillas, Iglesias, aunque por necesidades evidentes de orden militar, también construyeron Castillos y en muchos casos si bien no participaron de manera activa pusieron el dinero y la idea para que la construcción pudiera llevarse a cabo.
Por último añadir que no hemos de olvidar; que la primera función que se pueda constatar que realizaron Los Templarios en Tierra Santa (Jerusalén) fue la reconstrucción y acondicionamiento del Templo de Salomón para que este reuniera las características que para ellos eran necesarias para poder servir mejor a sus intereses.