martes, 13 de marzo de 2018

ALFONSO X EL SABIO Y LA ORDEN DE SANTA MARÍA DE ESPAÑA

Alfonso X el Sabio y la Orden de Santa María de España
,tambien llamada la de la Estrella.

Alfonso X de Castilla, llamado «el Sabio» (Toledo, 23 de noviembre de 1221 Sevilla, 4 de abril de 1284), fue rey de Castilla entre 1252 y 1284. A la muerte de su padre, Fernando III «el Santo», reanudó la ofensiva contra los musulmanes, y ocupó Jerez (1253), arrasó el puerto de Rabat, Salé (1260) y conquistó Cádiz (1262). En 1264, tuvo que hacer frente a una importante revuelta de los mudéjares de Murcia y el valle del Guadalquivir. Como hijo de Beatriz de Suabia, aspiró al trono del Sacro Imperio Romano Germánico, proyecto al que dedicó más de la mitad de su reinado. Los últimos años de su reinado fueron especialmente sombríos, debido al conflicto sucesorio provocado por la muerte prematura de su primogénito, Fernando de la Cerda, y la minoridad de sus hijos, lo que desembocó en la rebelión abierta del infante Sancho y gran parte de la nobleza y las ciudades del reino. Alfonso murió en Sevilla durante el transcurso de esta revuelta, no sin antes haber desheredado a su hijo Sancho.
Llevó a cabo una activa y beneficiosa política económica, reformando la moneda y la hacienda.
También es reconocido por la obra literaria, científica, histórica y jurídica realizada por su escritorio real. Alfonso X patrocinó, supervisó y, a menudo, participó con su propia escritura y en colaboración con un conjunto de intelectuales latinos, hebreos e islámicos conocido como Escuela de Traductores de Toledo, en la composición de una ingente obra literaria que inicia en buena medida la prosa en castellano. Elaboró de su pluma, las Cantigas de Santa María y otros versos, realizando una gran aportación a la lengua culta del momento en la corte del reino, el galaico-portugués, que por su noble autor nos ha perdurado.
Historia del reinado
En 1231, mientras Fernando III recorría las principales ciudades del reino de León después de haber tomado posesión de él, el soberano envió a su hijo el infante Alfonso, que contaba nueve años de edad y se hallaba en Salamanca, a devastar los reinos musulmanes de Córdoba y Sevilla.
El emir Ibn Hud, que había reunido un numeroso ejército dividido en siete cuerpos, se interpuso con él entre el ejército cristiano y la ciudad de Jerez de la Frontera, obligando a las tropas de Alfonso a combatir. Durante la batalla que se libró a continuación, conocida como la batalla de Jerez, el ejército de Alfonso derrotó a las tropas musulmanas, a pesar de la superioridad numérica de éstos últimos. Alfonso X el Sabio se refirió posteriormente a la batalla de Jerez, librada en el año 1231.
Conquista de los reinos de Murcia y Sevilla
Cumplida la mayoría de edad a los diecinueve años, Alfonso utiliza oficialmente el título de heredero y comienza a ejercer actividades de gobierno en el reino de León. Poco después, afronta diversas operaciones militares:
En 1243, debido a la enfermedad que sufría su padre, el infante se hizo cargo de la campaña de conquista del reino de Murcia (1243-1245), con la ayuda de ciertos caudillos musulmanes del territorio. En el transcurso de estas operaciones firmó el Tratado de Almizra (26 de marzo de 1244) con Jaime I de Aragón, su futuro suegro, estableciendo las fronteras entre ambos reinos.
En 1246-1247 participó en la guerra civil portuguesa, apoyando a Sancho II de Portugal frente a su rival Alfonso de Bolonia.
En 1247-1248 colaboró en primera línea en la conquista de Sevilla. A causa de la quebrantada salud de su padre, Alfonso se ocupó del reparto entre los miembros de la hueste de los nuevos territorios adquiridos, así como de distintas labores de gobierno.
En 1248 comenzó la conquista del Reino Taifa de Murcia que le correspondía en virtud al Tratado de Almizra por lo que las ciudades de Villena, Alicante, Elche, Orihuela, Murcia, Lorca y Cartagena fueron incorporadas a la Corona de Castilla.
Dos años antes de la toma de la ciudad de Sevilla se habían celebrado los esponsales del infante Alfonso con la infanta Violante de Aragón, hija de Jaime I de Aragón.
El 30 de mayo de 1252 falleció Fernando III el Santo, y el 1 de junio fue proclamado rey el infante Alfonso, que reinaría como Alfonso X de Castilla y de León.
Política interior
Fue el del Rey Sabio un reinado reformador, que iniciaría el proceso que desembocaría en el Estado Moderno de época de los Reyes Católicos. Fundamentó, asimismo, la supremacía de Castilla entre los reinos peninsulares.
La Orden de Santa María de España...
La Orden de Santa María de España, también conocida como la Orden de la Estrella, fue una orden militar española de carácter naval creada por iniciativa de Alfonso X el Sabio, rey de León y Castilla.

Origen
Después de la insurrección mudéjar que se produjo en el año 1264 en Murcia, las frecuentes incursiones de corsarios berberiscos en el litoral mediterráneo, decidieron al rey Alfonso X, el Sabio, a fundar una nueva orden que se encargara de la defensa marítima de su reino.
La orden fue creada alrededor del año 1270 para la defensa naval de la Corona de Castilla. Estaba instituida al modo de la Orden de Calatrava, y entre sus miembros había tanto caballeros laicos como clérigos, adscritos a cuatro conventos bajo la capitanía general del monasterio de Cartagena, con jurisdicción para la defensa del Mediterráneo, fue fundada esta orden que quedó constituida en su defensa, de la siguiente forma: los conventos de San Sebastián, La Coruña y Puerto de Santa María, defendieron el Cantábrico, Atlántico y Estrecho, respectivamente.
Desde 1273, se integró por deseo del rey en el orden del Císter y el convento de Cartagena quedó dependiendo de la abadía de Gran Selva (Francia) y el prior de Cartagena fue designado por el abad cisterciense. Los hábitos de la orden eran una túnica negra y una capa roja con una estrella dorada, en cuyo interior se encontraban bordadas las armas de la Corona.
La orden consiguió tener sello propio (en el de Cartagena aparecía la Virgen con el niño en el brazo izquierdo y dentro de una estrella de ocho puntas).
El Códice de Florencia de las Cantigas de Santa María contiene una cantiga dedicada a esta orden.
En el año de 1277, el rey Alfonso X, les concede varios privilegios como la exención de cualquier impuesto a los pastores de la Orden a excepción de comida y moneda forera-, exención de portazgo, y montazgo, comprar heredamientos y recaudaciones del reino de Murcia.
Sede conventual
En Cartagena se encontraba la sede matriz de la orden, en un convento cisterciense que fue mandado construir por el rey y en el que expresó su deseo de ser enterrado a su muerte. La orden fue puesta bajo la advocación de la Virgen del Rosell, talla medieval que se encuentra en Cartagena.
La orden poseía por donación real castillos como los de Alcalá de los Gazules, Berroquejo (Jerez de la Frontera), La Concepción (Cartagena), Oropesa, San Marcos (El Puerto de Santa María) y Torrestrella (Medina-Sidonia), y tenía también sedes en los puertos de San Sebastián, La Coruña y El Puerto de Santa María, dependientes de la principal en Cartagena.
Su primer maestre fue Pedro Núñez, comendador mayor en Castilla que antes lo había sido de la orden de Santiago. Participó personalmente en el repartimiento de la huerta de Murcia y, quedó encargado de la organización y desarrollo de la orden de la Estrella hasta 1280.
Fin
El día 23 de junio de 1280 tuvo lugar la batalla de Moclín, en la que las tropas castellanas, compuestas principalmente por miembros de la Orden de Santiago comandadas por el maestre Gonzalo Ruiz Girón y el infante Sancho el Bravo (aunque este último no tomó parte en la batalla), fueron derrotadas por las tropas musulmanas del rey Muhammad II de Granada. En el desastre perdieron la vida numerosos miembros de la Orden de Santiago, incluyendo a su maestre, que falleció varios días después del combate como consecuencia de las heridas recibidas.
Para evitar que la Orden de Santiago se extinguiera por la pérdida de sus miembros en Moclín, Alfonso X el Sabio integró en ella a los miembros de la Orden de Santa María, y nombró al maestre de esta última, Pedro Núñez, maestre de la Orden de Santiago, provocando con ello la desaparición de la Orden de la Estrella.
Refundación moderna
El 13 de agosto de 2008 se constituyó en Cartagena una orden religiosa católica que se proclamó heredera de la antigua Orden de Santa María que promociona, entre otras finalidades, el culto a la advocación mariana, la Virgen del Rosell, patrona de Cartagena (junto con los Cuatro Santos) y perteneciente a ciudad y la Diócesis de Cartagena.




(Dedicado a 
Tj de Cazorla)

JMZ