Y despunta el alba.
Pronto, en camino hacia la batalla...
pronto los rezos, se convertirán en ordenanzas
ciegos por La Luz.
pronto los rezos, se convertirán en ordenanzas
ciegos por La Luz.
Dos dioses en uno, darán fe a quienes cabalgan,
pronto darán nombre a tamaña matanza,
morirán los mejores desde el alba,
morirán los mejores desde el alba,
hasta bien acabada la jornada.
Serán muchos los que,
a manos alzadas por hermanos
que de noche juntos, rezan, hablan,
se hermanan, se despedirán de los que juntos contigo
bajo el templo rezan, ríen, hablan...
Te espero de nuevo después de la batalla,
y que tu Dios الله الآب te proteja de mi espada.
Que Cristo me proteja de la tuya, más, que de tu lengua afilada,/
Que Cristo me proteja de la tuya, más, que de tu lengua afilada,/
por la espada quedare en el campo de batalla ,
tu lengua me deleitará otra vez mañana cuando el sol desaparezca y luzca una luna blanca .
Bajo el templo esperare, por la noche tu llegada.
tu lengua me deleitará otra vez mañana cuando el sol desaparezca y luzca una luna blanca .
Bajo el templo esperare, por la noche tu llegada.
Nada para mí señor.
