domingo, 25 de febrero de 2018

COPLAS A LA MUERTE DE SU PADRE - JORGE MANRIQUE

Vivimos tiempos digitales. Es lo que hay, y es bueno, cómo no.
Vivimos tiempos veloces, muchas veces…de velocidad de vértigo.

Las noticias, las novedades de hace diez minutos, ya son viejas. El bombardeo de información es constante, y consumimos voraces lo último de lo último.
Aun así, intento encontrar tiempo para la parada, para el relajo mental que de paso a una cierta meditación, y atempere esa velocidad endiablada del día a día.

Después de muchísimo tiempo, escuchaba ayer a Paco Ibáñez, en la grabación de su disco en el Olimpia de Paris de 2 de diciembre de 1969…llovido ha, vive Dios…
Y cantaba don Paco nada menos que las COPLAS A LA MUERTE DE SU PADRE, de Jorge Manrique.
Escritas hacia 1479, se publican en Sevilla en 1494. Son parte fundamental de la mejor literatura en lengua castellana de nuestro país.
Temas antiguos y vigentes: Fugacidad de la vida (tempus fugit); fugacidad de lo humano, rapidez con que transcurre el tiempo, raudo hacia un destino igualador, etc.
Y, como no, serenidad cristiana, fortaleza del caballero don Rodrigo ante la llegada de lo inevitable. Sentido medieval de la existencia.
En fin, una delicia que os invito a recordar.







Antonio Espinosa, 16 de abril de 2016.